Quiero sentir tu voz
hablándome
respirando en mi piel,
sobre cada uno de mis sentidos,
tras tus labios,
esperándome,
diciendo que nada esta perdido,
todo es posible
con tus labios,
dentro de ellos,
fuera se sí.
Todo lo creo
si lo dices tú
son las verdades
que escondió el cielo,
para decirme
que solo por tus labios
conocí el sufrimiento.
Los recuerdo aún
esos labios arcanos
que me escondiste tanto,
hoy me los muestras,
hablando,
queriendo,
un dios resucitado,
una palabra de aliento.
Buscándome incansable
para perpetuarlos
en mis palabras,
esos labios delicados
que el mismo cielo
no pudo haber creado
sino que mas suaves
mas que las nubes
muy dulces
como el caramelo
tan perfectos
que el mismo cielo
no pudo haberlos creado.
Ya los veo
y me postro
ante tal creación divina,
mi alma se aclara
ante tal lozanía,
un resplandor
hermoso y sofisticado
no puedo perpetuarlos,
no puedo
siquiera describirlos,
los veo
y me confundo
como en un laberinto,
los deseo
y los pierdo,
se va huyendo
aquel sabor bendito
de tus labios,
los quiero
como necesitando
sentir la inspiración de aquellos
que solitarios y únicos
me dijeron tantas cosas
que ya no recuerdo
pero ellos siguen presentes
hablando
que el mismo cielo
nunca podrá poseerlos.
Labios sin cielo
Publicado por
Die Alborz
on domingo, 16 de agosto de 2009
Etiquetas:
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